martes, mayo 06, 2008

CHOSES VUES ...

- ¿Moisés estaba drogado? Benny Shanon, profesor de psicología de la Universidad Hebrea de Jerusalem, publicó hace algunas semanas un curioso artículo en la revista Time and Mind. Según Shanon, Moisés estaba drogado cuando presentó el Decálogo al pueblo de Israel en el Sinaí. Shanon asegura haber usado él mismo drogas halucinógenas en una ceremonia religiosa en una tribu del Amazonas. Como era de esperar, el artículo generó algo de revuelo. Dos breves comentarios: (1) Los grandes fundadores tienen un aura difícil de explicar (Washington desarmó un golpe de Estado simplemente sacándose los anteojos); (2) Me parece fantástico que un individuo pueda publicar con total libertad este tipo de opiniones, sin ser perseguido ni acusado de nada (basta imaginar lo que sucedería en algún país vecino de Israel con un artículo parecido). [Ofri Ilani: "Researcher: Moses was tripping at Mount Sinai", Haaretz.com]

- Retratos paralelos: De la Rúa & CFK. Me temo que ni Fernando de la Rúa ni Cristina Fernández de Kirchner sean algún día objeto de vidas paralelas al estilo de Plutarco. Al griego le interesaban los personajes con virtudes heroicas, como lo fundadores de civilizaciones. Lo que me preocupa es el creciente parecido entre De la Rúa y CFK. Estos "líderes" han expresado, cada cual a su manera, su deseo de gobernar un país moderno. ¿Cómo se define un país moderno? En Mackinlay's lo definimos como un país abierto al mundo y a la innovación, con una población conectada a las redes digitales, un sistema financiero al servicio de los emprendedores (y no de los amigos), y una organización política basada en la independencia judical —la clave del éxito— y en los demás elementos de los frenos y contrapesos: federalismo, poder ejecutivo fuerte y uni-personal, banco central autónomo, libertad de prensa. Aquí está entonces el problema. De la Rúa y CFK no saben, o no quieren, implementar la revolución. Su pesado entourage no desea el cambio: hermanos por aquí, cuñados por allá, amigos por todos lados — todos quieren gozar de los beneficios del poder ultra-concentrado. ¿La revolución? Nada, nichts, rien. Espere ver fotos de CFK en la proa de barcos, o "supervisando" obras con un aire de autoridad. Tal vez hasta le organicen un desfile militar. Todo muy parecido a De la Rúa. [Plutarco: Vidas paralelas].

1 comentario:

Anónimo dijo...

Por que no:)